Sunday, July 13, 2008

8 millones de niños

En general me gusta escribir en mi blog como una manera de escapar a la cotidianeidad y a los episodios a veces amargos cuando se es testigo de numerosas atrocidades en los países que he tenido oportunidad de conocer. Sin embargo, hay momentos en que es imposible eludir algunas historias. Hace unos días atrás estaba leyendo una noticia sobre niños en la India que desaparecen día a día y no se llega a saber nada mas de sus rastros. Probablemente terminan en otros países trabajando como esclavos en fábricas de Bangladesh, las chicas de castas bajas terminan en prostíbulos, se sabe de los niños chinos forzados a mendigar y tantos otros miles de pequeños forzados a enrolarse en las guerrillas de los conflictos armados.

Niños que desaparecen, que se desvanecen, que no dejan huellas y se los traga este mundo inhóspito. Sean del primer o tercer mundo, van a parar en las manos de traficantes de órganos, prostitución infantil o redes de esclavos. En Alemania, algunas estadísticas apuntan a que cada mes entre 6 y 8 pequeños desaparecen sin dejar rastro. En EEUU, el Centro Nacional de Menores Desaparecidos y Explotados maneja unos datos según los cuales cerca de 58.000 menores son secuestrados cada año por extraños.

En Haití, no solo secuestran a niños de familias pudientes, los pobres también desaparecen sin dejar rastro. Hace un par de días me impactó la noticia de una niña llamada Elysee de tan 4 años que no había regresado a su casa. Al indagar en las circunstancias, la pequeñita fue enviada a comprar algo (anda tu a saber que cosa) a la calle y nunca más regresó. Sus padres reportaron el hecho solo al final del día siguiente evidenciando que ni siquiera se dieron cuenta que la niña no estaba en la noche. A veces es un tema de padres desconsiderados, los niños andan solos por la calle a merced de que cualquier desgracia.

Solo para que se den cuenta, existen hoy 8 millones de niños esclavos en el mundo. Quizás un post no sirve de nada pero al menos hay que estar con los ojos abiertos y no caer en la insensibilidad. Noticias horripilantes como la de las jóvenes afganas que se prenden fuego debido a los maltratos que reciben por parte de esposo que las triplican en edad. Prefieren suicidarse o castigar su cuerpo para dejar de ser atormentadas por estos matrimonios forzosos. Mucho que pensar y sobre todo mucho por hacer. De momento la foto que les dejo es impactante.


Ghulam, una niña afgana que declaró «¿Qué voy a sentir? Nada. No conozco de nada a este hombre». Respuesta dada a la fotógrafa estadounidense Stephanie Sinclair instantes antes de que le tomara una foto junto al que iba a convertirse en su esposo, Mohamed, de 40 años.

No comments: