Thursday, November 17, 2005

TOP FIVE CAP HATIEN


  1. Viajes en Helicoptero Chileno en el Norte - La increíble sensación de viajar por los aires en un artefacto pequeño, ligero y a ratos de apariencia frágil. Con las puertas abiertas sin querer mirar hacia abajo me siento increíblemente insignificante ante esta libertad. Los viajes en helo significan lo más emocionante de mi trabajo en Haití.
  2. La Nissan Patrol mas conocida como el camioneton - Manejar una 4x4, perder todos los miedos a manejar en este contexto repleto de tap taps (peores que los micreros en Santiago) motociclistas que salen de cualquier parte, muchas subidas, lodo, hoyos, charcos. Manejar a la haitiana no tiene gracia pero el camioneton es otro de los elementos que me dan esa sensación de libertad en este lugar tan hostil.
  3. Cormier Punch - Un buen Cormier Punch lleva ron, limón y azúcar pero lo más importante es beberlo en Cormier en la playa en buena compañía, absolutamente memorable!!!
  4. Los domingos en la playa - Acompañados del número 3. los paseos a cormier o a l'abadie incluyen excelentes recuerdos de amigos que ya no están, de amigos que pronto se van y por eso fueron espacio de conversaciones, miradas y sobre todo relax para olvidarse del día a día en este país tan complejo y difícil.
  5. Jus de Chadeque - Bueno, saludable, amargo, de color verde claro y buena consistencia. Se le suele llamar pomelo, toronja o pamplemousse, aquí la chadeque es una de las frutas haitianas mas exquisitas.

Saturday, November 12, 2005

La Rata Voladora y el visitante atrevido


Inspirada por el Blog de Javi Chico, me decido a relatar las historias de Cabo Haitiano. Un lugar complejo que a veces odias, en otros momentos la gente te resulta entrañable, te la pasas muy bien, te la pasas muy mal y te preguntas si eres tu la que vive todo el día con este stress de no saber que aventura o loca historia te deparan los haitianos.

Anoche al salir muy tarde de la oficina, íbamos mi colega Sandra y yo caminando hacia el estacionamiento. Vale recalcar que a esa hora ya no hay nadie. Los UNPOL se van temprano a casa a eso de las 17horas, los civiles también desaparecen poco a poco y finalmente solo queda la sección electoral trabajando en este insalubre edificio.En plena oscuridad, ya que por alguna razón que desconozco los pasillos no están iluminados en Minustah (tal vez porque todos se van muy temprano a casa) veo la sombra de un extraño animal en la muralla.

Primero pensé que se trataba de un gato, cosa rara ya que suelen terminar en una olla o en alguna ceremonia vudu. Al rato la sombra veloz pega un enorme salto por encima de la cabeza de Sandra y en un vuelo olímpico cae al piso corriendo a toda velocidad.Impactadas las dos entendimos que se trataba de la rata más grande que habíamos visto en nuestras vidas. Para equilibrar el asunto ahora tenemos de invitado especial a nuestra oficina a un ratoncito diminuto y atrevido. El tipo camina por donde le da la gana como si la oficina le perteneciera. Por ser tan pequeño no me disgusta, me da un poco de nervios si se acerca mucho pero seria incapaz de matarlo o de pedirle a alguien que lo eliminen. Me daría pena ya que al menos es divertido tener un intruso de vez en cuando.

Así son los días del cap, con ratones, con arañas así que solo queda pedirle a Diosito (que de seguro se ha olvidado de Haití) que me cuide de todos los bichos, malarias, infecciones, violencias, chimeres y que ahora añada a la lista me cuide de las ratas gigantes que de las diminutas me encargo yo.