Probablemente este post no es muy alegre porque es para recordar a dos personas que ya no están con nosotros. Siempre pensé que había que rescatar a ciertos personajes de Cap, lamento no haberlo hecho cuando estaban con vida. Aquí va una dedicatoria para ellos.
Bernadette
Hace poco me enteré de que había muerto nuestra camarera fiel de Cormier. Como bien dice Sandra en cualquier otro país uno se enferma y puedes ir al médico y te logras curar. En Haití aunque sea una enfermedad simple allá es mortal por lo difícil que es recibir una buena atención médica. Quizás la familia de Bernadette no tuvo el dinero suficiente para llevarla a un médico o comprarle medicina. Siempre con una sonrisa ella atendió a la gama de clientes onusianos que aparecían en Cormier. Fue de las pocas que se sabía mi nombre y yo el de ella. El clásico cormier punch es uno de mis mejores recuerdos de allá y Bernadette forma parte de ellos. No conocí su vida, no sé cuanto ganaba pero me figuro que era muy poquito y que a pesar de todo ella siempre fue amable y delicada distinguiéndose del resto del personal que muchas veces no era nada atento.
Monsieur Colas
Cuando dejé Cabo Haitiano no me despedí de Monsieur Colas, el presidente del BED. Lamento no haberme tomado unos minutos ya que con la distancia y las semanas uno valora mejor los resultados del trabajo, la convivencia y la experiencia enriquecedora del mundillo Capois.
M. Colas estaba quizás preparándose para las próximas elecciones municipales, pero de seguro su ritmo de vida no se había transformado demasiado desde la partida de Sandra o la mía. Son muchos los recuerdos que nos unen a este señor. Ambas sabemos que nos tocó un representante del CEP que si bien no era el más pilas al menos era buena persona y así quedan capítulos memorables como una coca cola con Monsieur Colas el día del cumpleaños del papá de Sandra. M. Colas bailando compa en la kay, sus clásicas expresiones de: “on est la, on tient le coup” (estamos aquí, aguantando). Madame Carmele su fiel secretaria que cubría muchas veces los despistes u olvidos de su jefe. La vida pasa, la gente parte a otros países mientras M. Colas abandonó este mundo el jueves tras sufrir un paro cardíaco. Cuando Pilar me avisó me dio bastante pena, quizás nunca conocí a su familia pero finalmente trabajamos por tantos meses con él, conociendo sus mañas y sus sonrisas. Tantas reuniones, DJESC, fotos, momentos difíciles y buenos momentos también. Sólo sé que M. Colas tenía ganas de ir a USA para descansar, que de seguro estaría trabajando para las próximas elecciones y que lamentó bastante que las chicas electorales de la Minustah nos fuéramos después de todo este tiempo. Sus restos serán sepultados en grande Riviere du Nord donde espero descanse en paz.
De seguro estas dos personas quedarán en mi recuerdo y también en el corazón de muchas otras personas.
1 comment:
Sin dudas, M. Colas era un personaje de Haiti Chérie y se merecía un post desde hace mucho tiempo. Queríamos escribir "un coca cola con M. Colas" hace unos meses... Pobre M. Colas, me da mucha pena esta noticia. Recuerdo con mucho cariño los momentos, buenos y malos, que pasamos con él y espero que nuestros maltratos onusianos no lo hayan afectado demasiado.
Bernadette aparece en una de tus fotos, hace unos cuantos posts, en un momento de alegría cuando celebramos la segunda vuelta en Cormier, con presidente y prestige. Seguramente la pobre Bernadette pensó "qué les pasa a estos locos de la minustah?" La noticia de la muerte de Bernadette me impactó mucho porque estaba todavía en Cap y cuando Javi me la contó fue como un gran bajón, andabamos en el camionetón, felices porque Javi se iba de vacaciones y de repente regresamos "a la dure réalité haitienne".
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